El cumplimiento regulatorio constituye una de las cuestiones
de mayor importancia y trascendencia para todas las ramas de la industria y los
servicios que se prestan a nivel comercial, ya que de ello depende la
viabilidad y continuidad de las actividades empresariales. Los clientes de las
empresas, ya sea públicos o privados, comúnmente fijan o adoptan estándares de
cumplimiento regulatorio que hoy en día se entienden como requisitos
indispensables para sostener relaciones de negocios con sus proveedores.
Por su parte, las autoridades de todos los niveles cuentan
con facultades y mecanismos de supervisión, vigilancia e inspección que les
permiten ejercer acciones cada vez más rigurosas y trascendentes, de la mano de
normas y regulaciones muy específicas, que constituyen verdaderas cargas
prácticamente para todos los ramos empresariales.
Todo ello ha convertido al cumplimiento regulatorio en una
tarea continua que exige que las empresas destinen una importante cantidad de
recursos materiales y humanos, dedicados a la planeación del cumplimiento, la
prevención y la atención de contingencias.
El área de práctica de Derecho Administrativo y Regulatorio
se enfoca en integrar el conocimiento de diversas áreas de especialización, que
al interactuar con los distintos departamentos de las empresas, ponen
estratégicamente al alcance de nuestros clientes las herramientas necesarias
para alcanzar el cumplimiento regulatorio y atender contingencias, con un
enfoque preventivo y, al mismo tiempo, altamente proactivo, con la finalidad de
que los recursos destinados a esta tarea prevengan riesgos regulatorios y al
mismo tiempo produzcan valor real y cuantificable.
Nuestros clientes confían en nosotros porque nos concentramos en proteger sus intereses con un enfoque que nos permite definir cada estrategia legal, a partir del pleno entendimiento de sus negocios, la normatividad aplicable y los retos específicos que enfrentan.
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Ciudad de México |
